Que el Real Madrid siguiese con vida en la Copa del Rey se encontraba amarrado a nombres puntuales que como el de Vinicius, serían claves para remontar en el Camp Nou. Así fue la noche del brasileño en una jornada llena de hitos a su favor. Empezó la nueva era.
Vinicius Jr., Rodrygo y Karim Benzema. Así comenzó el Real Madrid un operativo remontada por el Camp Nou. El extremo izquierdo, nuevamente emparejado con Ronald Araújo en la banda, el brasileño vivió una noche llena de retos en la Copa del Rey que terminó de la mejor de las maneras.
«La idea no es volverse loco para marcarse un gol. La idea es hacer un partido completo con y sin balón. No hemos llegado muchas veces y es un aspecto importante. No vamos a volvernos locos… porque puedes meter un gol en el minuto 5 y después encajar dos. La idea es hacer un partido completo», reflexionaba Carlo Ancelotti sobre una jornada donde con la mente más fría que nunca y el corazón hirviendo, se debía buscar como mínimo la diferencia de un gol tras 90 minutos para seguir con vida. Vinicius era parte de ese plan marcado desde hace días
¿Qué sistema usaría Carlo Ancelotti? Suponía una de las grandes preguntas que se hacía el aficionado blanco tras ver en acción ese 4-2-3-1 que dio un glorioso 6-0 contra el Valladolid en la mejor actuación defensiva del equipo en lo que vamos de curso. No hubo dudas cuando el Real Madrid anunciaba una formación donde el italiano apostaba por ese sistema que nació hace unos días y dejaba en claro su postura para tomar un Camp Nou donde solo valía la victoria pensando en la final de Sevilla. Ahí, Vini explotó.
“Empezó la nueva era”
Algunos le atribuyen el primer tanto mientras que otros buscan a Karim, pero nada importa cuando se mira el total del partido. Un puñal de actitud y velocidad fue un Vinicius que provocó el penalti del 0-3 y que con un pase a la contra, permitió a Benzema cerrar la mayor goleada que recordemos a corto plazo por el Camp Nou.
“Empezó la nueva era”, dijo hace no mucho Ronald Araújo y no estaba en lo incorrecto. Comenzó la era Vinicius, el momento de una generación de jóvenes que hoy bailó por Cataluña y que con el mejor jugador del Madrid en lo que vamos de curso, puso patas arriba el Clásico. En Sevilla, a por otro título.