Toni Kroos entró en cólera, como nunca antes, debido al arbitraje de Isidro Díaz de Mera en el Real Madrid – Sevilla. El colegiado desesperó con todas sus decisiones al alemán.
Primero anuló un gol legal a Lucas Vázquez por una falta rigurosísima. En cualquier otra liga no se habría pitado. Después, se ‘tragó’ un penalti a Rüdiger. Y amonestó hasta a Ancelotti por protestar. Así como al propio Kroos.
«No me jodas», decía el alemán claramente ante las cámaras. Y es que no entendía ninguna de las faltas que estaba señalando. Sus decisiones, totalmente equivocadas, perjudican al Real Madrid.
Cómo debe ser el partido para que sean Ancelotti y Kroos los únicos amonestados. Ambos por protestar. Y se ha llevado una pitada ensordecedora al descanso del Santiago Bernabéu.
Desesperación
La parroquia de Chamartín está desesperada con la labor de Díaz de Mera. No es para menos. El colegiado, más allá de esta acción ha pitado ciertas faltas que son difíciles de explicar.
Al grito de «Corrupción en la Federación», el Santiago Bernabéu ha mostrado su total descontento. No es para menos, dado que parece que la denuncia del Sevilla FC ante el CTA por el vídeo de RMTV está dando sus frutos. Lamentable.