Quién se lo iba a decir a Zinedine Zidane… De pasar por París, trasquilado, y con la cabeza medio cortada, a dormir como líder de LaLiga tras haber pasado por el Ramón Sánchez-Pizjuán y el Wanda Metropolitano.
¡Vaya cambio! Del 3-0 del PSG al Real Madrid en la Champions League al 0-1 en Sevilla y 0-0 en el derbi madrileño ha habido muchísimas diferencias. ¿Cuál ha sido la gran clave? Los jugadores, prácticamente los mismos, los grandes reforzados con Zizou.
El mensaje de Zidane
Zidane ha convencido al equipo de que todos deben trabajar colectivamente, algo que se venía echando en falta y que generó reproches en el vestuario tras la derrota ante el PSG. Ahora todos corren como el que más ante las dificultades para lograr resultados solo por la calidad de los jugadores, arrimando todos el hombro Zidane está seguro de que lo sacarán adelante.
Intensidad, la primera clave
Es la realidad, Zizou cree que jugando con intensidad sigue teniendo un equipo A y un equipo B para aspirar a ganar todos los títulos. El marsellés tiene muy claro que esa es la actitud a seguir. El mensaje ha calado en el vestuario y por ello se deshace en elogios hacia su plantilla. Estar junto a los jugadores es la gran clave para volver a ganar.
La solidez, el otro factor decisivo
“No es solo la intensidad. Nuestra solidez sobre todo, yo creo que vimos hoy un Real Madrid muy fuerte. Más que encajar goles no hemos concedido ni una ocasión y eso es importante. Nos ha faltado algo ofensivamente, pero tengo que estar contento porque sumamos y a pensar en el próximo partido”, afirmó Zizou sin reparos. El Madrid ha dado con la tecla para volver a competir y eso ya es mucho tras ver el descalabro del Parque de los Príncipes.