Una vez más el Madrid fue robado en un partido. Qué raro. El Valladolid tuvo fortuna en este domingo al conocer que sería Bengoetxea el encargo de arbitrar el partido. Su antimadridismo se ve a kilómetros, y su máximo objetivo a perjudicar al conjunto blanco, ya sea desde el césped o desde la zona de VAR. Rodrygo no solo percibió esa entrada brusca, sino que en el descuento recibió un empujón tremendo por parte del defensor del Valladolid, y el árbitro ni se molestó en mirarlo.
En el partido entre el Valladolid y Real Madrid hubo un atraco en contra del conjunto blanco. En los primeros 10 minutos de partido, Rodrygo se aplicó para crear un contraataque, aunque su pensamiento terminó peor de lo que se imaginaba.
Joaquín, jugador del Valladolid, se lanzó con los tacos de frente para arrasar a Rodrygo. Los afilados tacos impactaron sobre el tobillo del futbolista brasileño, y este cayó derrumbado retorciéndose de dolor. Bengoetxea supo que la acción fue de clara tarjeta roja, pero con tal de ayudar al conjunto vallisoletano tan solo le mostró la tarjeta amarilla (hubiera sido una ventaja enorme para el Madrid).
El caso es que se han sacado pruebas a la luz de que esta entrada merece expulsión. Viajando hacia el pasado, Sergio Ramos hizo una falta a Messi totalmente idéntica. Imagínense que sucedió: el camero vio tarjeta roja. En el caso de Joaquín con Rodrygo tan solo se enseñó la tarjeta amarilla. La diferencia es que el objetivo es perjudicar al Real Madrid, no hay otra explicación decente. Todo esto sin añadir el penalti no pitado sobre el propio Rodrygo en el descuento.