El Real Madrid sigue haciéndole la vida imposible a Jota Jordi, el fanático y tertuliano culé de El Chiringuito, que ayer volvió a sufrir el síndrome de la Champions, ese en el que siempre acaba ganando el Madrid y él un poco menos feliz.
El momento más llamativo llegó cuando Fede Valverde disparó a portería para hacer el tercer y último gol del partido para los de Ancelotti que le permitieron sumar tres puntos más. Jordi no podía creer que el Madrid tuviera tanta suerte, explicaba.
En parte, por la cantidad de rebotes que hay en la jugada, realmente, primero toca en un defensor, luego el cancerbero, el larguero y por último de nuevo en el portero para acabar en el fondo de las mallas. Un disparo inapelable, a los que Fede tiene acostumbrados al madridismo.
Y es que si bien con el primer gol del Nápoles Jordi se desataba, con este de Valverde, que finalmente lo dieron en propia portería, se volvió loco. Su indignación se estaba haciendo de esperar en esta temporada, pero parece que poco a poco todo va volviendo a la normalidad.
Hoy llegará el turno del Fútbol Club Barcelona, quien se verá las caras a domicilio ante el Oporto, quizás el cabreo de Jota Jordi pueda ampliarse si su equipo empieza a cometer e