Aurélien Tchouaméni fue titular anoche contra el Celta. El francés llegó este verano por 80 millones más variables del Mónaco y su primera temporada de adaptación, como es lógico, está siendo complicada. Por delante tiene a jugadores como Kroos, Modric y Valverde.
Anoche no tuvo su mejor actuación y, a pesar de todo, Ancelotti quiso transmitirle tranquilidad. Habló con él en el vestuario: «Aure, no te creas que esto es una bronca. Es para ayudarte. Tuviste 3 pérdidas graves por falta de concentración y eso hay que evitarlo».
Una charla completamente normal y de las muchas que se dan en todos los partidos. Ancelotti entiende a la perfección a Tchouaméni, que apenas tiene 23 años y es difícil aclimatarse a un club de la exigencia del Real Madrid.
Más si es tu primer año y debes competir con leyendas del fútbol mundial como Kroos y Modric, quiénes van a renovar otra temporada. Por eso, Carlo viene haciendo un trabajo especial con él.
Paciencia
Nadie en el Real Madrid duda de sus cualidades. Saben que será uno de los mejores del mundo y que es cuestión de tiempo que vaya adaptándose. Lo mismo le ocurrió a Camavinga la temporada pasada y ahora está desatado.
Normalmente, las aficiones se acostumbran a fichajes de jugadores contrastados y que rinden desde el primer día. Sin embargo, la política del Real Madrid es firmar potencial, madurarlo en casa, y que después se conviertan en estrellas. Vinicius, Rodrygo, Camavinga, Valverde y muchos otros pueden dar fe de ello.