Kylian Mbappé va a jugar en el Real Madrid. El crack de Bondy, por fin, recalará en la casa blanca a partir de la próxima temporada. El culebrón ya ha acabado y es un secreto a voces que el francés vestirá la elástica merengue a partir del 1 de julio. Tan solo falta que se haga público.
El comunicado oficial llegará cuando desaparezca la posibilidad de que el galo se vea con su futuro equipo en la final de la Champions. Ambos pueden verse las caras en Wembley y este es el hecho que lo ha atrasado absolutamente todo. Sin embargo, el madridismo tiene que estar tranquilo, puesto que ya no hay vuelta atrás y tampoco se producirá ningún giro inesperado, tal y como ocurrió en 2022.
De hecho, tal y como apunta OKDiario, medio que dirige Eduardo Inda, el astro parisino está dispuesto a rebajarse considerablemente su salario. Actualmente cobra 72 millones de euros bruto, mientras que en el Real Madrid ganará 30 ‘kilos’ brutos, es decir, unos 15 netos. De este modo, entra en la escala salarial y estará en cifras muy parecidas a las de Jude Bellingham y Vinicius Junior.
Premisa básica
Este era un factor indispensable para que este movimiento se ejecutase de una vez por toda. Florentino Pérez cuida mucho este tema y es consciente de que un salario desorbitado podría romper el gran ambiente que hay en la plantilla que dirige Carlo Ancelotti.
Por esta razón, Mbappé, que para muchos es el mejor del mundo, será uno más en la casa blanca. El madridismo, por su parte, ya lo espera con los brazos abiertos y hay muchas ganas de verle vestido de blanco. De hecho, su presentación, que todavía no se sabe cuando será, promete ser multitudinaria.