Nasser Al Khelaifi se está moviendo mucho en el mercado en busca de los sustitutos de la estrella parisina. Prácticamente, la dan por perdida, porque sigue sin querer renovar y no quieren que se marche gratis en 2024, por lo que están dispuestos a pagarle una parte de la prima de fidelidad y venderle al Real Madrid.
En esa búsqueda hay varios candidatos, entre los que están. João Félix, Victor Osimhen, Dušan Vlahović y Harry Kane. Todos ellos son futbolistas que interesan mucho al PSG, pero tienen como prioridad a Harry Kane. Sin embargo, es posiblemente junto al de Osimhen la operación más complicada. Daniel Levy es una persona con la que es muy difícil negociar, ya que siempre intenta «exprimir» al comprador.
Además, las palabras del delantero inglés cuando el club parisino le mostró su interés, han sorprendido a Nasser Al Khelaifi: «O me voy al Madrid o me quedo en el Tottenham». El presidente del club parisino se enfadó al escuchar estas palabras, porque todos los jugadores sueñan con vestir la camiseta merengue. Lo de Kane no era secreto, porque hace años lo declaró públicamente en sus redes sociales.
El Madrid tiene otro plan
En el club merengue no barajan la opción de Harry Kane y están centrados en Kylian Mbappé. El delantero inglés tiene un año más de contrato el Tottenham y el club londinense quiere pedir más de 100 millones por su traspaso. Florentino Pérez no está dispuesto a llegar a esas cifrar, y por eso mismo no se lo plantean.
Además, la situación de Mbappé con el Paris Saint-Germain ha paralizado el interés del Real Madrid en otros delanteros para esta temporada. Por lo tanto, Kane va a tener que decidir entre quedarse en el Tottenham o cambiar su mentalidad y fichar por otro club que le permita cambiar de aires y competir por grandes títulos.
Hay varios clubes como el Manchester United, el PSG y el Bayern de Munich que están muy pendientes a la situación del delantero inglés. Todos ellos necesitan un 9 en sus filas, y ahora mismo el mejor en el mercado es el delantero del Tottenham. Daniel Levy es el duro obstáculo que tendrán que vencer en el mes y medio que le queda al mercado de fichajes.