Joselu se lo merecía, había tenido oportunidades, pero no estuvo fino. Pero al final, el gallego marcó y pidió perdón al Bernabéu.
El Real Madrid tenía la misión de conseguir una victoria que le permitiría al equipo asegurarse el primer puesto del grupo, pero no iba a ser fácil ya que el rival era el Nápoles.
Lo iban a poner difícil porque ellos necesitaban la victoria, y lo demostraron adelantándose al inicio del partido y empatando a dos nada más volver de vestuarios. El empate valía a los merengues, pero querían más.
Nico Paz logró un golazo que acercaban los 3 puntos, pero Joselu seguía buscando su gol. Y es que, estuvo fallón, con varias ocasiones muy claras que se le terminaron escapando.
Pero en el descuento no falló. Aprovechó un pase fantástico de Bellingham para terminar fusilando a Joselu y reconciliarse con el Bernabéu, y es que acabó pidiendo perdón.
Sabía que había estado fallón, pero eso no le resta profesionalidad. Quiso disculparse y eso que acabó marcando el cuarto del Madrid para cerrar un nuevo triunfo en Champions.